Correr es un ejercicio completo. El conocimiento de tu estado físico es básico para hacerlo sin lesionarte. Correr es un ejercicio ideal para alcanzar y mantener una forma física óptima.
Es una actividad deportiva que puede causar lesiones, si no se toman las medidas adecuadas. Los expertos de Sanitas nos han ayudado con varios consejos: Lo primero es utilizar el material adecuado. El instrumento que te ayuda a correr son tus zapatillas de deporte. Mantienen tus pies apoyados y absorben impactos. Cámbialas cada 800km o cada año.
La hidratación y una alimentación sana tienen que formar parte de tus hábitos de vida saludable. Recuerda que tienes que beber antes de tener sed para mantener tu cuerpo hidratado. Si corres hazlo hidratad@. No quieras recuperar de golpe lo que no has bebido durante el resto del día.
El calentamiento es fundamental para evitar lesiones porque pone el cuerpo y la mente en situación para el deporte. Tienes que estirar-la flexibilidad es básica- y realizar suaves ejercicios cardiovasculares que aumenten de manera progresiva. Termina de correr de manera progresiva.
Otra de las cosas que debes saber es que si haces un gran esfuerzo, debes descansar. Cuando corres con frecuencia es básico que respetes los tiempos de recuperación. La forma física se gana con el reposo del cuerpo. Descansar te hará más fuerte.
Un hábito muy importante es no aumentar la distancia más de un 10% a la semana. Tienes que correr de manera responsable para evitar lesiones. Acostumbra a tu cuerpo al esfuerzo continuado para obtener un estado de forma óptimo. No te precipites.
Una circunstancia importante con la actividad física es conocer tus debilidades. Tienes que fortalecer las partes de tu cuerpo que lo necesiten. De esta manera el riesgo de lesión cuando corras se reducirá. Tus articulaciones te lo agradecerán.
Por último y no menos importante. Tienes que escuchar a tu cuerpo en términos de esfuerzo, recuperación y descanso. Corres hacia tu estado de forma ideal. Si quieres hacer un ejercicio como este, la regularidad será tu mayor aliado. Para ser constante, como te decíamos, debes cuidar lo que te lo permite, tu cuerpo. Si no tienes prisa conseguirás correr mucho tiempo sin hacerte daño. ¿Te animas?
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